Ex combatientes de Colombia se convierten en empresarios

Más de 1.100 colombianos desmovilizados crearon sus propios negocios en el año 2014 como parte del proceso de reinserción establecido por el gobierno a través de la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR).

Con el apoyo de la OIM y la USAID, así como de socios regionales, 1.158 excombatientes (221 mujeres y 937 hombres) establecieron un total de 1.119 nuevas empresas. Esto incluye 1.084 empresas individuales y 35 empresas conjuntas.

“Esta iniciativa apoya los talentos empresariales de las personas que se encuentran en proceso de reintegración, para que puedan crear sus propios negocios como una forma de asegurar su situación legal. Esto no solo combate el desempleo entre la población en reintegración sino también contribuye al desarrollo de los municipios y departamentos, ya que algunas empresas generan empleo más allá de los miembros de la familia, fortaleciendo con ello la consolidación de la paz regional”, enfatizó el Director General de la ACR, Joshua Mitrotti.

La estrategia se llevó a cabo en 23 de los 32 departamentos del país. Se dio prioridad a los departamentos con el mayor número de ex combatientes en proceso de reintegración. Los cinco departamentos en los que se estableció la mayoría de las empresas fueron: Córdoba, con 150 nuevas empresas (13,4% del total); Cundinamarca, con 123 (10,9%); Antioquia, con 114 (10,1%); Santander, con 98 (8,7%); y Magdalena, con 87 (8,7%).

“Gracias a una alianza entre la cooperación internacional y el gobierno, en 2012 se creó un mecanismo de seguimiento para estos proyectos, con el objetivo de promover la sostenibilidad de las empresas. Hoy en día, más del 90% de los negocios en los que se aplicó esta nueva metodología se encuentran todavía en operación”, ilustró el Director de USAID en Colombia, Peter Natiello.

Antes de que existiera el mecanismo de seguimiento, casi la mitad de las empresas estaban fracasando.

Además del apoyo técnico prestado al gobierno, la OIM apoya a las personas con el diseño de sus planes de negocios y capacitación para pequeñas empresas, lo que incluye contabilidad, comercialización, ventas y servicio al cliente. Asimismo, proporciona seguimiento y asesoramiento para garantizar que las empresas sean sostenibles.

“Hacemos un seguimiento de las empresas en términos de producción, comercialización, planificación, administración y sostenibilidad financiera. Los resultados nos permiten identificar las fortalezas y oportunidades que facilitan el crecimiento o la estabilidad, así como las debilidades y amenazas que podrían poner en riesgo”, apuntó el Jefe de Misión de la OIM en Colombia, Alejandro Guidi.

“Para nosotros, esto significa la realización de un sueño, dado que al salir del grupo armado nos sentimos inseguros porque no habíamos estudiado, no teníamos recursos económicos y nadie nos quería dar trabajo porque éramos desmovilizados”, relató Graciela, una ex de combatiente que se sometió al proceso de reintegración y que ahora es propietaria, junto con su esposo, de un café internet en Barrancabermeja.

El proyecto ha recibido financiación por más de 12 mil millones de pesos (USD 6.000.000) de la ACR, la USAID y la OIM.

Entre las nuevas empresas hay almacenes de venta al por menor, salones de peluquería, alquiler de maquinaria, clases de música, construcción, industria y manufactura, producción de café, así como ganadería y producción agrícola. Un total de 233 nuevas empresas son rurales; 221 pertenecen a mujeres; 24 pertenecen a afrocolombianos; 19 pertenecen a poblaciones indígenas; y 14 pertenecen a personas con discapacidades físicas.

En este momento hay 56.541 colombianos desmovilizados; 21.229 de ellos participan activamente en el programa de reinserción del gobierno y 8.068 ya han cumplido con los requisitos para graduarse con éxito del programa.

El conflicto armado de Colombia ha durado más de 50 años y ha dejado 220.000 muertos, en su mayoría civiles. En 2003, las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), el principal grupo paramilitar, negoció su desmovilización colectiva de acuerdo con la Ley 975 o Ley de Justicia y Paz. Sus 35.000 ex combatientes se unieron al programa de reinserción del gobierno y participaron en el servicio comunitario obligatorio. Además, el gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han estado negociando un acuerdo de paz en La Habana desde hace más de dos años.

Para obtener más información favor contactar con:

Jadin Vergara
OIM de Colombia
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