Italia - El número de migrantes y solicitantes de asilo que llegaron a Italia por mar en 2014 alcanzó un total de 170.100 personas al concluir el año. Eso equivale a unas cuatro veces el número registrado en 2013, cuando las autoridades italianas registraron la llegada de 42.925 personas.

Las cifras, proporcionadas por el Ministerio de Interior de Italia, muestran que a pesar de las condiciones peligrosas del mar, los migrantes han seguido cruzando el Mediterráneo en invierno, cuando las llegadas suelen disminuir.

“En diciembre de 2013, se registró la llegada de 2.701 migrantes y solicitantes de asilo, en comparación con los 6.732 de diciembre de 2014”, indicó Federico Soda, Jefe de Misión de la OIM en Italia. “Estas cifras sugieren que los flujos de migrantes están relacionados con el deterioro de las múltiples y complejas crisis humanitarias cerca de las fronteras exteriores de Europa, tales como la guerra de Siria y los disturbios causados por la inestabilidad política en Libia. Muchas de estas personas huyen de la guerra, la persecución y los regímenes totalitarios”, añadió.

Con 42.323 personas llegadas a Italia en 2014, Siria sigue siendo la mayor nación emisora de migrantes, seguida de Eritrea (34.329). Otros países emisores importantes fueron: Malí (9.938), Nigeria (9.000), Gambia (8.707), Palestina (6.082) y Somalia (5.756). El número de inmigrantes sirios en diciembre sumó 3.202 personas, lo que refleja un ligero aumento con respecto a las 2.950 personas recibidas en noviembre.

En su mayoría los inmigrantes de 2014 procedían de Libia y algunos de Egipto; sin embargo, en los últimos meses eran sobre todo de Turquía. Estos nuevos flujos de inmigración estaban compuestos en su mayoría por refugiados sirios que trataban de llegar al sur de Italia en buques de carga más grandes, operados por traficantes sin escrúpulos que cobran entre USD 4.000 y USD 6.000 por persona.

“La emergencia no es la cantidad de personas o el riesgo de sobrecargar Europa, un bloque de países que juntos tienen una población de unos 500 millones de personas”, señaló Soda. “Las emergencias son los conflictos, la inestabilidad y la gran incertidumbre en una serie de países cercanos a Europa de los que huyen aquellas personas que pueden hacerlo”.

“Si ponemos estas cifras en perspectiva, veremos que Turquía alberga a alrededor de 1,8 millones de refugiados sirios y que el Líbano (un país muy pequeño de 4 millones de habitantes) ha acogido a más de un millón”, agregó el Sr. Soda.

La OIM calcula que en 2014 más de 3.200 inmigrantes perdieron la vida en el mar en su intento de llegar a Italia, lo que es una pérdida sin precedentes de vidas en esa ruta migratoria. Sin embargo, también se salvó la vida a miles de personas: 85.000 fueron rescatados por la operación Mare Nostrum de la Marina de Italia, más del 35.000 por la Guardia Costera de Italia, y más de 40.000 por 237 buques comerciales contactados por las autoridades italianas para que presten apoyo en situaciones de emergencia.

“Es urgente responder colectivamente a estos flujos migratorios”, manifestó Soda. “La migración sólo puede ser gestionada por la Unión Europea en su conjunto: su escala y complejidad requiere la cooperación y la acción colectiva”.

“Por esta razón, la OIM solicita la creación de procesos de políticas y programas concretos con todos los agentes interesados para mejorar la gobernanza de la migración y evitar más pérdidas de vidas”, concluyó Soda.

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